Estados Unidos reduce su actividad petrolera: perforación cae y anticipa menor producción

La industria energética estadounidense registró una caída significativa en su actividad de perforación, según el más reciente informe de la firma Baker Hughes, considerado el barómetro más confiable para medir el pulso del sector de petróleo y gas en el país.

Durante la última semana, las compañías energéticas redujeron en 10 el número de plataformas activas, lo que deja el total en 544 equipos, su punto más bajo desde septiembre. Esta disminución rompe una racha de cuatro semanas consecutivas de estabilidad y sugiere un enfriamiento en la inversión y la actividad de exploración.

Una caída que envía señales de alerta a los mercados

Los analistas explican que la reducción de plataformas suele ser un indicador adelantado de una futura caída en la producción, debido a que menos equipos operativos implican menos pozos nuevos que puedan mantener o aumentar el nivel de extracción.
La relación es directa: cuando las plataformas bajan, la producción tiende a seguir esa tendencia semanas o meses después.

La cifra de 544 plataformas refleja también el impacto de diversos factores:

• Volatilidad en los precios del crudo, marcada por tensiones geopolíticas.

• Presión financiera sobre las empresas, que priorizan rentabilidad por encima del crecimiento agresivo.

• Condiciones económicas globales inciertas, que han moderado la inversión en nuevos proyectos.

¿Qué significa esto para el sector petrolero estadounidense?

Estados Unidos, uno de los mayores productores de petróleo y gas del mundo, depende en gran medida de la actividad de perforación para mantener su liderazgo global. Una caída en la cantidad de plataformas puede:

• Reducir el ritmo de producción de crudo.

• Aumentar la dependencia de inventarios estratégicos.

• Elevar la incertidumbre sobre el suministro futuro.

• Influir en los precios internacionales del petróleo, especialmente si la tendencia se mantiene.

Expertos del sector indican que, aunque la reducción es moderada, podría ser el inicio de un ciclo más prolongado de contracción si las empresas continúan enfrentando altos costos operativos y limitaciones financieras.

Perspectivas para las próximas semanas

Si la tendencia de reducción continúa, se espera que el mercado petrolero reaccione con mayor sensibilidad, especialmente en un contexto global donde los recortes de producción de OPEP+, las tensiones en Medio Oriente y la desaceleración económica mundial ya influyen en la oferta y la demanda.

Para muchos analistas, esta baja en plataformas es una señal que los inversionistas y operadores deben monitorear de cerca, pues podría anticipar un ajuste en la producción estadounidense durante el primer trimestre de 2026.